Carta a los adolescentes que obtienen su primer teléfono inteligente

¡Acabas de conseguir tu primer teléfono inteligente! Este es un gran avance en tu vida. Ese teléfono que estás a punto de sacar de la caja es uno de los dispositivos más sorprendentes jamás creados, y va a ser tu compañero constante durante los próximos dos años. Es una increíble pieza de tecnología que puede ser utilizada de muchas maneras diferentes.

Se puede usar para hacer muchas cosas buenas, pero si no eres precavido, también se puede usar para hacer un sin número de cosas malas. Así que, antes de encenderlo por primera vez, creo que sería prudente invertir solo unos minutos en pensar y planificar.

Dios tiene un propósito para tu teléfono

La tecnología es un regalo de Dios. Cuando leemos la Biblia, encontramos que, al principio de los tiempos, Dios creó a dos personas, desnudas y solas en un pequeño jardín, y les dio una tarea gigantesca: extenderse por este mundo y ejercer dominio sobre él (Gé. 1:28). Para ello, necesitarían inventar tecnologías.

Si iban a plantar y cosechar cultivos para alimentar a su familia, primero tendrían que inventar un arado. Si iban a extenderse por la tierra para asentar países y construir ciudades, necesitarían inventar puentes y barcos. De esa manera, la tecnología es buena. La tecnología es un medio a través del cual podemos llevar a cabo el mismo propósito para el que Dios nos creó.

Luego, cuando Jesús estuvo en esta tierra, le dio a su gente una nueva descripción de trabajo que está destinada a ir junto con la primera. Nos dijo que lleváramos el evangelio, la buena noticia de la salvación a través de Jesucristo, a todo el mundo (Mt. 28:18-20). Y de nuevo, una de las formas en que lo hacemos es a través de la invención y el uso de tecnologías. No es de extrañar, entonces, que los cristianos estén siempre atentos cuando una nueva tecnología sale al mundo. Cada tecnología es una oportunidad.

Cuando entiendes los mandamientos que Dios te ha dado, ves que Dios tiene grandes propósitos en mente para tus tecnologías, e incluso tu teléfono inteligente. Ese teléfono puede ser usado para organizar mejor tu vida para que puedas lograr más de las cosas que más importan; puede ser usado para comunicarte con otros para que puedas hablar de buenas nuevas en sus vidas; puede ser usado para leer la Biblia y listar tus oraciones; puede ser usado en cientos de formas que sirven a los propósitos que Dios te ha dado. ¡Agradece a Dios por tu teléfono inteligente!

Satanás tiene un propósito para tu teléfono

Desafortunadamente, hay mucho más en la historia. Tan pronto como Dios creó al hombre y le dio esta misión mundial, el hombre cayó en el pecado. Adán y Eva determinaron que desobedecerían a Dios, y cuando lo hicieron, trajeron el pecado a este mundo. La tecnología no escapó ilesa. También existe en este mundo caído. Esta realidad significa que cada tecnología, incluyendo tu nuevo teléfono, puede ser usada para hacer cosas que son malvadas. Dios tiene un propósito para tu teléfono, pero también lo tiene Satanás.

Debido a que este es un mundo atrapado en una gran batalla cósmica entre el bien y el mal, cada nueva tecnología entra en la lucha. Cada tecnología trae algunos beneficios y algunos riesgos. Por cada cosa buena que tu teléfono puede hacer, hay otras cosas malas que puede hacer.

Tendrás la opción ante ti cada día y cada momento: ¿la usarás para el bien o para el mal? ¿Utilizarás tu teléfono para llevar a cabo las tareas que Dios te ha dado, o lo usarás para obstaculizar esas tareas? ¿Usarás tu teléfono para servir a Dios o para servir a Satanás? Agradece a Dios por tu teléfono inteligente, pero pídele sabiduría para usarlo correctamente.

Tu corazón tiene un propósito para tu teléfono

¿Qué es lo que amas más que a Dios? En aquellos tiempos en los que no encuentras tu alegría y satisfacción en Dios, y en aquellos tiempos en los que el pecado parece tan tentador, ¿qué es lo que promete alegría? ¿Qué es lo que promete satisfacción? ¿Qué es esa cosa que necesitas tanto que incluso estás dispuesto a pecar para conseguirla?

Para algunas personas, es el dinero, y están convencidas de que, a menos que tengan mucho dinero, nunca podrán estar verdaderamente satisfechos. Incluso robarán para conseguirlo. Para algunas personas, es el poder, y creen que el camino a la felicidad es acumular poder sobre otros. Pisotearán o intimidarán a la gente para conseguirlo.

Sea lo que sea esa cosa para ti, la Biblia la llama un ídolo. Un ídolo es cualquier cosa que pongas en lugar de Dios, algo que, al menos por un momento, ocupa el primer lugar en tu corazón. Sea cual sea tu ídolo, será una tentación especial para ti cuando uses tu teléfono.

Si idolatras el placer sexual, probablemente estarás tentado a usar tu teléfono para ver pornografía. ¿Sabías que más de la mitad de toda la pornografía se ve ahora en dispositivos móviles como el tuyo? Esto significa que mucha gente como tú compró un teléfono inteligente para poder enviar mensajes de texto a sus amigos y tomar fotos de sus vacaciones, pero de alguna manera terminaron usándolo para ver pornografía. Usaron esta gran tecnología dada por Dios para hacer daño en lugar de bien.

Si idolatras la popularidad, si es ser admirado y tener muchos seguidores lo que te hace sentir bien contigo mismo, entonces estarás tentado a usar tu teléfono para perseguir a ese ídolo. Puedes usar la cámara para tomar fotografías inapropiadas de ti mismo en Instagram, o puedes usar la aplicación de Facebook para decir palabras ofensivas a otras personas. Ese teléfono que puede ser usado para hacer tanto bien y para dar tanto aliento, ahora será usado para causar daño.

No hay mucha gente que compre un teléfono con la intención de usarlo para dañar a otros o para ver pornografía. Pero donde está tu corazón, allí estará también tu tecnología. La forma en que uses tu tecnología revela tu corazón. Muestra si tu corazón está orientado hacia Dios, hacia encontrar la verdadera alegría y satisfacción en él, o si estás intentando encontrar una falsa alegría y satisfacción en las cosas que él prohíbe. En cualquier momento, tu corazón tiene un propósito para tu teléfono. Sí, agradece a Dios por tu teléfono inteligente, suplícale sabiduría para usarlo bien, y protege tu corazón.

Úsalo para la gloria de Dios

Y ahora es el momento de sacar ese teléfono de la caja y encenderlo por primera vez. Mientras lo tienes en tu mano, ¿por qué no te tomas un momento para orar? Pídele a Dios que te ayude a usar bien ese teléfono. Comprométete ante él ahora mismo a que, con lo mejor de tus habilidades, solo lo usarás para servir a sus propósitos. Recluta a uno o dos amigos creyentes para que les rindas cuentas y hazlo regularmente.

Luego ve, glorifícalo con y a través de él.

Tim Challies

Tim Challies

Tim Challies es un pastor, notable orador, autor de numerosos artículos, y un pionero en la blogosfera cristiana. Decenas de miles de personas visitan Challies.com cada día, convirtiéndolo en uno de los blogs cristianos más leídos y reconocidos del mundo. Tim es autor de varios libros, incluyendo Teología Visual, La Próxima Historia y, más recientemente, Épica: Un viaje alrededor del mundo a través de la historia cristiana. Él y su familia residen cerca de Toronto, Ontario.