Tres ejemplos de una fe que lucha

Cuando Pablo dice que Dios cumplirá —con su
poder por medio de nuestra fe— las buenas
resoluciones que hagamos, lo que quiere decir
es que vencemos al pecado y hacemos lo que es
justo al estar satisfechos con todo lo que Dios
promete ser para nosotros en Cristo en los
próximos cinco minutos, cinco meses, cinco
décadas, y por la eternidad.

Veamos tres ejemplos de cómo podría cumplirse
esto en su vida:

1. Si deciden en el corazón dar a modo de
sacrificio y generosamente, el poder de Dios
para cumplir este propósito les será concedido
según pongan su confianza en la gracia para el
futuro en las siguiente promesas: «Mi Dios proveerá
a todas vuestras necesidades, conforme a sus
riquezas en gloria en Cristo Jesús» (Filipenses 4:19);
«El que siembra abundantemente, abundantemente
también segará» (2 Corintios 9:6); «Dios puede hacer
que toda gracia abunde para vosotros, a fin de que
teniendo siempre todo lo suficiente en todas las cosas,
abundéis para toda buena obra» (2 Corintios 9:8).

2. Si deciden en el corazón renunciar a la pornografía,
el poder de Dios para cumplir este propósito les será
concedido al poner su confianza en la gracia para el
futuro que se expresa en estas promesas:
«Bienaventurados los de limpio corazón, pues ellos
verán a Dios» (Mateo 5:8); «Si tu ojo derecho te es
ocasión de pecar, arráncalo y échalo de ti; porque te
es mejor que se pierda uno de tus miembros, y no que
todo tu cuerpo sea arrojado al infierno» (Mateo 5:29).
Mucho mejor; maravillosamente mejor; y mejor para su
satisfacción plena.

3. Y si deciden en el corazón proclamar a Cristo cada
vez que la oportunidad se presente, el poder de Dios
para cumplir este propósito les será concedido al poner
su confianza en la gracia para el futuro en la siguiente
promesa: «No os preocupéis de cómo o qué hablaréis;
porque a esa hora se os dará lo que habréis de hablar»
(Mateo 10:19).

Que Dios aumente día a día nuestra fe en su inagotable
gracia venidera, comprada por sangre, para la gloria
de Cristo.

Encuentra más devocionales de John Piper en Español
en nuestro sitio web: